¿Cómo es el orgasmo en el tantra?
El sexo tántrico se ha convertido en una práctica cada vez más habitual. Son muchas las personas que se han acercado a esta manera de practicar el sexo. Parejas o personas solas que quieren probar esta experiencia y descubrir todas la ventejas que ofrece el sexo tántrico. El orgasmo en este es muy intenso, pero lo que cuenta de verdad es el camino que se recorre hasta él.
Existe el mito que dice que la experiencia tántrica consiste en retrasar la eyaculación masculina. Una forma de hacer que el orgasmo del hombre se retrase todo lo posible y de esta manera se alcance un éxtasis más intenso. Pero esto no es así.
El orgasmo en el sexo tántrico
El sexo tántrico es algo más que las caricias en los genitales. Para obtener la máxima satisfacción, es importante que las sensaciones se repartan y obtengan por todo el cuerpo. Las caricias han de recorrer la piel, creando momentos intensos y haciendo que los sentidos exploten en un orgasmo intenso y espectacular.
Para conseguir la máxima compenetración en el sexo tántrico, hay que saber bien qué es lo que quiere y necesita la otra persona. Conocer bien los gustos de la pareja es fundamental y con ese camino ya conocido, es más fácil hacer que la relación llegue a buen puerto.
En el masaje tántrico se explora, se acaricia y se siente de manera muy intensa. Cada movimiento coordinado durante el masaje ofrece un placer intenso a ambas partes de la pareja, lo que permite una integración total entre ambos.
Por eso, el contacto visual es muy importante a la hora de practicar el sexo tántrico. Y eso es porque ha de haber una comunicación completa y de forma continua entre ambos. Acompasar la respiración es otra manera de hacer que se incremente el placer en pareja. Cada movimiento ha de ser realizado para generar esa sensación intensa entre ambos.
El orgasmo llega después, pero sin prisa. No importa si eres hombre o mujer. Lo importante es hacer que el recorrido hasta el climax sea sosegado, olvidarse de las prisas y disfrutar con intensidad cada segundo, cada caricia, cada beso y cada suspiro.
La intensidad del orgasmo tantra es muy grande y ayuda a sentirse relajado, en paz con uno mismo y muy unido a la pareja sexual con quien se ha compartido la experiencia. Una manera diferente y muy satisfactoria de alcanzar el orgasmo más intenso y completo.